No son tiempos nada fáciles en Baviera, donde el Bayern quiere reverdecer los laureles que Stuttgart y Wolfsburgo han decolorado en estos últimos años. La entidad muniquesa no sólo tiene problemas para imponer su autoridad en Europa, donde tiene complicado lograr el billete que da acceso a los octavos de final de la Champions League, sino que también sufre dificultades en el campeonato local, viendo amenazada su supremacía por un amplio ramillete de equipos. Pese al mal comienzo de temporada, hay motivos para la esperanza, ya que cuando se han asociado jugadores como Robben o Ribery, el equipo se ha mostrado como una apisonadora en la Bundesliga, logrando varias goleadas. Los continuos problemas físicos del galo y el holandés, han provocado que el equipo no tenga la continuidad necesaria que se le exige a un conjunto de la talla del bávaro. No obstante, no todo son malas noticias para los aficionados muniqueses, puesto que la estancia de Louis Van Gaal en el banquillo del Bayern supone una gran oportunidad para los jóvenes talentos de las categorías inferiores del club. Si primero fueron Badstuber y Muller los que se beneficiaron de la llegada de Van Gaal al Allianz Arena, ahora otros precoces talentos como Alaba y Kopplin pueden tener la oportunidad de dar al salto al primer equipo.
Badstuber es un mediocentro defensivo reconvertido a central zurdo que se caracteriza por un cuidado trato al cuero, el cual le permite sacar el balón jugado desde atrás con bastante elegancia. Su pasado como centrocampista le otorga un magnífico rigor táctico que se plasma cuando la zaga realiza las basculaciones y que le permite subsanar, en gran medida, sus carencias de velocidad. Casi siempre concentrado, realiza las coberturas al lateral de su zona, algo que permite dar rienda suelta a la vocación ofensiva de Philip Lahm sin que ésta perjudique al equipo. Su talla le resta velocidad, por ello busca la recuperación del cuero anticipándose a su marcado, pero también es capaz de robarlo cuando le encaran en carrera, gracias a su acierto realizando entradas a ras del suelo. Un zaguero sobrio, que se muestra bastante seguro en todas sus acciones. Gracias a su envergadura, domina el juego aéreo, siendo una referencia en las jugadas a balón parado de ambas áreas. Tiene que pulir algunos defectos propios de la bisoñez, pero muestra una gran madurez con tan sólo veinte años. Comenzó a formarse como jugador en el TSV Rot de su región natal, equipo que le sirvió como trampolín para ingresar en las categorías inferiores del VFB Stuttgart. Más tarde, en el año 2002, pasó a formar parte de la cantera del Bayern, en la que fue escalando peldaños hasta alcanzar, de la mano de Van Gaal, el primer equipo. Con la marcha de Lucio al Inter este verano, la zaga se quedaba corta de efectivos, agravándose la situación con la lesión de Martín Demichelis a comienzos de temporada. Por ello, el preparador holandés otorgó la titularidad a Badstuber, y éste no la desaprovechó, consolidándose como un fijo en las alineaciones de la entidad del Allianz Arena.
Kopplin es un lateral izquierdo de largo recorrido. Dotado de un buena técnica individual, es bastante rápido y no lo duda ni un sólo instante cuando decide incorporarse al ataque, siendo, en ocasiones, demasiado alocado en sus irrupciones ofensivas y perjudicando a su equipo al que deja en inferioridad numérica a la hora de defender los ataques rivales. No obstante, cuando se interna en campo rival es peligrosísimo, con una buena conducción de balón en carrera, gracias a la cual es capaz de desequilibrar a los zagueros contrarios. Muy incisivo, es capaz de desbordar tanto por fuera como por dentro, gracias a su correcto manejo de ambas piernas, lo que también le facilita el trazado de magníficas diagonales para triangular con los centrocampistas ofensivos, siendo igualmente capaz de ganar la línea de fondo para surtir de precisos centros a los arietes. Percute por su banda hasta el límite vertical del terreno de juego, pero también puede asistir desde la zona de tres cuartos, lanzando precisos envíos que generan dudas tanto en los arqueros como en los zagueros rivales. Inteligente, encara con facilidad y saca mucha provecho en las situaciones de superioridad con su compañero de banda. Aunque se muestra voluntarioso en labores defensivas, debe corregir sus errores tácticos y supeditar menos su espalda a su despliegue físico, ya que ofrece demasiados huecos a los extremos cuando el equipo rival sale al contragolpe. En resumen, un jugador de banda que necesita ser pulido en el apartado defensivo pero muy útil para su equipo cuando se incorpora al ataque. Criado en la cantera del club bávaro, ha ido quemando etapas en las categorías inferiores hasta llegar al segundo equipo. También ha brillado con los jóvenes del combinado nacional, teniendo una destacada actuación en el Europeo sub-19 que los germanos conquistaron en la República Checa y en el Mundial sub-20 que se ha disputado en territorio egipcio. Últimamente, entrena con regularidad a las órdenes de Louis Van Gaal, pero juega sus partidos con el filial dirigido por Gerd Müller y Mehmet Scholl, esperando que el técnico holandés le dé la alternativa en una posición que está bastante bien cubierta en la primera plantilla.
Alaba es un centrocampista con mucha llegada a posiciones francas para el gol. Capacitado para asumir las labores de distribución del juego ofensivo, llama la atención por su personalidad y dinamismo, ya que se halla en continuo movimiento durante todo el partido buscando estar siempre en línea de pase. Dotado de un notable control del esférico, su conducción en carrera es buena y, en gran medida, le facilita el regate. Atesora una notable visión de juego, lo que le permite enviar grandes pases al hueco, pero debe mejorar en la lectura del juego y ser menos vertical en algunas ocasiones. Potente en la arrancada, es capaz de jugar tanto pegado a la banda izquierda como en el doble pivote, sacrificándose en tareas defensivas y realizando una presión intensa gracias a su fondo físico, no obstante, debe aprender a dosificarse mejor, ya que llega casi sin fuerzas a los instantes finales del partido, debido a esfuerzos en la presión que muchas veces son inútiles. Empezó a jugar al fútbol en las divisiones inferiores del modestísimo SV Arpen, para después ingresar en la cantera del FK Austria de Viena, club en el que continuó con su progresión hasta llegar a las categorías inferiores del Bayern de Munich en el verano de 2008. En la entidad bávara se enroló en la disciplina del equipo sub-17, para luego ascender al sub-19 y, este verano, al segundo equipo. Las buenas actuaciones del joven austriaco, de madre filipina y padre nigeriano, no han pasado desapercibidas para Van Gaal, que le ha inscrito en la lista para la Champions League y le hace entrenar con la primera plantilla habitualmente. Tampoco han sido ignoradas por Didi Constantini, seleccionador absoluto del combinado nacional austriaco, quien viendo las condiciones del joven en las selecciones sub-17 y sub-21 austriacas, le hizo debutar con tan sólo 17 años en Saint Denis, en el choque que medía a los tiroleses con Francia, convirtiéndole en el jugador más joven de toda la historia en defender la elástica de la selección de Austria. Ahora el joven mediocampista sólo piensa en hacerlo bien con el filial muniqués para ascender al primer equipo, aunque no lo tendrá fácil para hallar un hueco en la medular de la primera plantilla.
Müller es la aparición más ilusionante de un canterano de la entidad bávara desde el debut de Schweinsteiger. Un futbolista muy difícil de encasillar; se desenvuelve a las mil maravillas como segundo punta, se encuentra cómodo como mediapunta, llegando con fuerza desde atrás y también cumple escorado a la banda, bien sea en la derecha, su perfil natural, bien sea en la izquierda, donde hace bastante daño trazando diagonales y permutando su posición con el mediapunta. Es un jugador que destaca por sus continuas llegadas a posiciones de gol, exhibiendo su duro y eficaz golpeo con ambas piernas desde media distancia. Muy inteligente, interpreta correctamente el juego y se mueve con frescura por el frente de ataque, generando espacios para sus compañeros de vanguardia y asisitiéndoles cuando están en posiciones óptimas para el disparo a portería. Sin tener un regate eléctrico, está capacitado para driblar a los zagueros rivales con sus quiebros secos, desbordando con la cabeza levantada para asistir a sus compañeros. Pese a ser un jugador de gran envergadura, no siente predilección por el juego de espaldas, sino que se encuentra más cómodo de cara a portería para poder combinar mediante pases cortos, no obstante puede proteger el cuero gracias a su correcta colocación del cuerpo. Dominador del juego aéreo, no se impone sólo por su talla sino que maneja los gestos técnicos del remate con la testa y sabe colocarse en las jugadas a balón parado. Un atacante incisivo y constante, que nunca se esconde y que baja a recibir para ejercer de puente entre la medular y la delantera cuando no recibe pases cerca del marco rival. Criado en la cantera del club muniqués, siempre hizo goles a pesar de desempeñar también el rol de asistente desde la banda derecha. Fue quemando etapas hasta llegar al segundo equipo, donde sus buenos encuentros llamaron la atención de Jurgen Klinsmann, en esos momentos técnico de la primera plantilla del Bayern, quien le dio sus primeros minutos en la élite durante un partido de la Bundesliga frente al Hamburgo. Como el joven Müller seguía haciéndolo bien con el segundo equipo, el técnico teutón le volvió a recompensar con otra oportunidad, pero esta vez en la máxima competición continental. Con la eliminatoria ante el Sporting de Lisboa ya decidida, el bisoño atacante salió en la segunda mitad y tuvo tiempo para anotar un gol que cerraba la goleada encajada por los lusos. Dado el convulso final de temporada que vivió el club bávaro, el chico no dispuso de muchas más oportunidades y fue cayendo en el olvido. Sin embargo, todo cambió con la llegada de Van Gaal al banquillo del Allianz Arena, puesto que el técnico neerlandés apostó por el talento germano, otorgándole confianza para que brillara, como hizo en la Audi Cup. En la Bundesliga comenzó siendo un jugador que disputaba las segundas partes, pero a base de buen juego y goles logró colarse en las alineaciones y actualmente ya es una pieza indispensable en el primer equipo.
4 comentarios:
Hola:
Acabo de encontrar tu blog y te felicito.
De los jovenes bavaros que nombras solo creo que realmente Muller tiene ya encarrilada su carrera. Es atrevido, tiene disparo lejano, desborde y talento, algo que en múnich no atesoran demasiados futbolistas.
Un saludo desde El Enganche
Alaba ya he debutado con su selección y pinta bien, puede llegar lejos si Van Gaal confía en él.
Müller también está a punto de debutar con Alemania, pero la desgraciada muerte de Enke va a retrasar su debut, por lo que deberemos esperar, aunque no nos importa hacerlo por Enke.
Badstuber también va a jugar bastante en primera, ya que la confianza que le tienen Van Gaal le va a llevar lejos.
Saludos desde http://ojeadorinternacional.blogspot.com/
buen analisis ivan, creo que el bayern a pesar de su mala racha tiene grandes esperanzas para mi gusto la mejor y la que mas futuro le veo es a muller.
un saludo desde elfutbolquerido.blogspot.com y desde granfuturoaqui.blogspot.com
Muller y Badsturber tienen afianzada su carrera, Kopplin gusta mucho y seguro que triunfa pero Alaba? no se ha sobrevalorado lo poco que lo he visto no me a convencido aun asi habra que seguirlo. Saludos desde http://caviardefutbol.blogspot.com/
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