La temporada pasada, el Olympiakos fue uno de los equipos que mejor se movió en el mercado griego. A la incorporación de Ernesto Valverde en el banquillo, se añadieron otros fichajes de nacionalidad argentina y brasileña. Así, llegaron Belluschi, Dudu Cearense, Leto y Diogo. Las expectativas del club ateniense eran claras, ganar el título liguero y no ser un convidado de piedra en la máxima competición continental a nivel de clubes, la Champions League. El trabajo del técnico español pronto iba a estar en entredicho, ya que en la ronda previa de la Liga de Campeones quedaría eliminado después de no ser capaz de remontar el 3-0 encajado en Chipre ante el Anorthosis, en la ida de la eliminatoria. Tras el traspié en competición internacional, el equipo se centró en la competición doméstica y pronto se puso en la cima de la clasificación, manteniendo el liderato hasta el final sin demasiados problemas. El broche de oro a la gran temporada realizada por el equipo de el Pireo llegaría con la conquista de la Copa de Grecia, consiguiendo el doblete. En la buena marcha del equipo ateniense tuvo una gran influencia una de las adquisiciones, Diogo.
Diogo es un habilidoso mediapunta reconvertido a segundo punta. Poseedor de un gran nivel técnico, regatea con extrema facilidad y entrega con precisión, merced a su clarividencia en la zona de tres cuartos. Es un jugador que está posicionado cerca del área rival gran parte del partido, pero se le puede ver bajando a canalizar el juego ofensivo. Capaz de distribuir y anotar, lo que le convierte en un jugador muy completo. Aunque se desenvuelve por el centro, acostumbraba a dejarse caer a ambas bandas para arrastrar a sus marcadores y crear huecos a sus compañeros de ataque. Lleva el balón pegado al pie, con una conducción elegante y un impresionante cambio de ritmo cuando tiene que dejar atrás a su marcado. Ideal para ejecutar los contragolpes por su panorámica visión de juego y su capacidad para proteger el balón con espacios por delante, abriendo sus largos brazos. Si es un jugador ideal para portar el balón en las transiciones, es perfecto para aguantar la posesión del esférico cuando su equipo vence por la mínima y queda poco tiempo para la conclusión del partido, por su capacidad para aguantar el esférico, que le hace destacar en el juego de espaldas, tirando paredes a sus compañeros con facilidad. Tiene una buena zancada y puede superar a los zagueros por velocidad, ya que a pesar de las apariencias no es un jugador al que le falte rapidez. Un jugador muy completo que puede dar el gol con un pase entre líneas o bien anotarlo él con un gran golpeo, ya que, además de un preciso remate de cabeza, posee un excepcional disparo con ambas piernas.
Su carrera comenzó en las categorías inferiores de la Portuguesa, en las que ingresó a muy temprana edad. Debutó a principios de 2006, con el club que le formó cómo jugador, ante el modesto Santo André en el Campeonato Paulista. La 'Lusa' siempre ha sido considerado cómo un histórico en Brasil, pero durante la irrupción de Diogo en el primer equipo, el club naufragaba en la Serie B brasileña. Tras su debut, rápidamente se hizo asiduo en las alineaciones del primer equipo, continuando con su progresión hasta convertirse en la piedra angular de la afamada entidad carioca.
El año 2007será difícil de olvidar para este futbolista brasileño. Tras dejar pinceladas de su clase en la anterior campaña, en ésta se echaría el equipo a la espalda, logrando el ansiado ascenso a la máxima categoría del deporte rey brasileño y firmando sublimes actuaciones que le servirían para ganar el galardón que le acreditaba cómo el mejor jugador de la categoría de plata.
Después de sus sobresalientes temporadas en la Serie B, pocos dudaban de sus capacidades en una categoría superior, pero si todavía quedaban algunos, tuvieron que callarse ante los hechos, ya que Diogo no sólo siguió con su nivel de juego sino que lo incrementó, provocando, a su vez, que sus compañeros tampoco notasen el salto de categoría, por esa capacidad que posee de hacer mejores a los jugadores que le acompañan en el campo.
Su extraordinario rendimiento le catapultó a la selección olímpica de Brasil. Con el combinado nacional, Diogo consiguió la medalla de bronce, pero no pudo hallar un hueco en el once inicial, ya que en él se hallaban futbolistas de la talla de Anderson, Ronaldinho o Pato. Tras la cita en el continente asiático, regresó a Brasil, pero sería por poco tiempo, porque haría las maletas para irse a Grecia, después de que el Olympiakos pagara una cifra cercana a los diez millones de euros por hacerse con sus servicios. En el club ateniense continuó con su gran progresión, adquiriendo protagonismo en el equipo, pasito a pasito, en la competición liguera. Sin embargo, sería en la Copa de la UEFA, en la que el equipo no estaría especialmente acertado, donde más brillara, finalizando como uno de los máximos goleadores de la competición. También tuvo un papel determinante en la final de la Copa griega ante el AEK. Este año no ha perdido ni un ápice de su ambición y ha comenzado entonado la temporada, ganándose la confianza de Ketsbaia, su nuevo técnico.
También disponible en:http://caviardefutbol.blogspot.com
1 comentario:
Pues otro jugador a seguir, intentaré ver algún partido del Olimpiacos esta Champions para ver jugar a este joven jugador del que tenía buenas referencias.
Saludos desde http://ojeadorinternacional.blogspot.com/
Publicar un comentario