viernes, 14 de agosto de 2009

DIRK MARCELLIS



Con las excepciones de la Liga Portuguesa y la Premier League, la pasada campaña ha sido temporada de cambio de campeones en los grandes campeonatos de Europa. En España se pasó del dominio merengue al ciclón 'culé', en Francia el dominador lionés cedió ante la pujanza del Girondins, en Alemania el todopoderoso Bayern se vio superado por los 'lobos' de Wolfsburgo y en Holanda el PSV observó cómo el sorprendente AZ de Louis Van Gaal acababa con su hegemonía. Tras cuatros años consecutivos, el conjunto de la Philips no sólo perdió el título liguero sino que tuvo que conformarse con la cuarta plaza, quedando así fuera de la Champions League. Bajas de jugadores del calibre de Farfán o Gomes disminuyeron considerablemente el nivel de un equipo al que cada año le costaba más mantener su supremacía. Eliminados también en la fase de grupos de la Liga de Campeones, la temporada puede calificarse como catastrófica, pero el conjunto de Eindhoven cuenta en sus filas con promesas, muy cerca de ser ya realidades, como Dzsudzsak, Afellay o Toivonen, que invitan a un resurgimiento del equipo en esta campaña. Entre todas esas perlas, uno de los futbolistas que más ha brillado la temporada pasada fue Dirk Marcellis.

Marcellis es un zaguero que destaca por su anticipación. Rápido, fuerte, bien por alto, con presencia de veterano y bastante contundente. Una de sus mejores armas es la versatilidad, ya que rinde al mismo nivel actuando en el eje de la zaga que en el carril derecho de la misma. Concentrado durante los noventa minutos, cuando desempeña la posición de central siempre realiza las coberturas al lateral de su zona y muestra una gran compenetración con sus compañeros de zaga. Como lateral, es difícil de superar en el uno contra uno, mostrándose muy correoso en la marca cuando no consigue obtener el cuero haciendo gala de su anticipación. A veces se excede en sus entradas, por precipitación a la hora de medir, pero no es un jugador agresivo, de los que intentan marcar el territorio con entradas duras. Un defensor con capacidad de liderazgo, como demostró con su capitanía en la selección sub-17, que posee una excepcional disciplina táctica.

Hincha confeso del PSV desde que era un niño, fue criado en la cantera del conjunto de la Philips y debutó con el primer equipo por la plaga de lesiones que sufría el equipo en la posición de lateral derecho. Maravilló a su entrenador y, a partir de ahí, se consolidó en el eje de la zaga, aprovechando la marcha de Manuel Da Costa a la Fiorentina. Siguió acumulando partidos como titular en la élite, ya que su técnico no sólo le alineó en la Eredivisie sino que le otorgó su confianza en un escaparate del calibre de la copa de la UEFA. Internacional en las categorías inferiores de la selección oranje, despuntó en el Mundial sub-17 de Perú en 2005, en el que compartía vestuario con otras perlas como Diego Biseswar o el arquero Tim Krul, y, desde entonces, se dispararon sus expectativas en el país neerlandés.

Tras su buena campaña en la primera división holandesa, fue convocado para defender la camiseta de su país en los Juegos Olímpicos de Pekín, compartiendo defensa con zagueros más experimentados como Jaliens. Holanda llegaba al continente asiático con una selección que hacía soñar incluso con las medallas, pero lo cierto es que pasó con más pena que gloria por China y Dirk fue uno de los pocos que estuvo a su nivel, demostrando su regularidad. Tras el mal trago olímpico, regresó a Eindhoven, donde fue uno de los más destacados en la desastrosa campaña del PSV, volviendo a mostrar que es un futbolista maduro, al que las circunstancias adversas de su club no minaron su rendimiento.



No hay comentarios: