viernes, 23 de marzo de 2012

PATRICK HERRMANN

Terceros en la Bundesliga y con plaza casi asegurada para disputar competición europea la próxima campaña, los seguidores del Borussia Mönchengladbach viven un dulce sueño tras dejar atrás el fantasma del descenso que les acechó durante toda la pasada temporada. Lucien Favre llegó y transformó al equipo sustentándolo en dos jóvenes valores como Ter Stegen y Reus. El ex atacante del Rot-Weiss Ahlen está firmando una campaña espectacular moviéndose con libertad por todo el frente de ataque. Una libertad concedida por el técnico suizo después de que haya logrado consolidar en el carril diestro del ataque a otro prometedor jugador, Patrick Herrmann.

Herrmann  es un habilidoso extremo diestro que destaca por su inusitada facilidad para repartir asistencias. Potente y bien dotado técnicamente, se deshace sin dificultades de los rivales que salen a su paso gracias a su buena conducción de balón en carrera. Inteligente a la hora de interpretar el juego, sigue bien la jugada cuando transcurre por el costado contrario y sorprende a los rivales con sus diagonales sin balón al primer palo. Incisivo y con capacidad de desborde, domina ambos perfiles y llega constantemente hasta el fondo de su carril. Intenso y sacrificado en la presión, debe adquirir mayor fortaleza muscular para no salir perjudicado en el cuerpo a cuerpo. Vertical, asiste con precisión, pero en ocasiones peca de un individualismo que le impulsa a cometer errores en la toma de decisiones.

Un atacante con ciertas dosis de oportunismo, que demuestra olfato goleador gracias a su facilidad para pisar área rival libre de marca. Dinámico, su posición natural es la banda diestra, pero no le cuesta desenvolverse en el costado contrario y, poco a poco, está adquiriendo experiencia para actuar en posiciones interiores filtrando buenos pases en profundidad. A pesar de ser un futbolista con gran capacidad de desequilibrio individual, se asocia con facilidad, tocando bien al primer toque y contribuyendo a otorgar fluidez a la circulación de balón. Devastador con espacios, se muestra como pez en el agua saliendo al contragolpe o cuando la zaga rival concede muchos metros a su espalda. Atesora un buen golpeo desde media distancia y mucha sangre fría a la hora de finalizar las jugadas, definiendo bien al primer toque delante del portero.

Nacido el 12 de febrero de 1991 en la ciudad alemana de Saarbrücken, Patrick Herrmann comenzó a darle las primeras patadas a un balón con cuatro años defendiendo la camiseta del FC Uchtelfangen, un modesto club situado al noroeste de su ciudad natal. A pesar de su baja estatura y su endeblez muscular no tardó en destacar por encima de sus compañeros. Sus técnicos pronto vislumbraron en él un talento especial y se resignaron a perderle tarde o temprano. El club le quedaba pequeño y necesitaba un salto en su carrera para seguir progresando.

A los trece años, el FC Saarbrücken decidió incorporarle a sus categorías inferiores. En el conjunto de la capital del Sarre continuó con su excelente progresión y, escalando peldaños en su cantera, los técnicos de la federación germana decidieron llamarle a filas con el combinado nacional. Se convirtió en una de las joyas de la generación del 91 y llamó la atención de los principales equipos del país. Fue el Borussia Mönchengladbach, siempre atento a las jóvenes promesas que surgen en suelo teutón, quien consiguió incorporarle a su entramado juvenil a los diecisiete años.

Ya afincado en el estado federal de Renania del Norte-Westfalia, le bastó con un año para dar el salto hacia el profesionalismo. En enero de 2010 se producía su estreno en la Bundesliga. A partir de ese duelo contra el Bochum se consolidó en la primera plantilla, disfrutando de minutos en las segundas partes hasta final de temporada. La siguiente campaña iba a ser la de su confirmación. Tras completar la pretemporada como futbolista del primer equipo a todos los efectos, empezó a disfrutar de la titularidad gracias a su imparable evolución.

Sin embargo, aunque las cosas a nivel individual marchaban viento en popa, los resultados colectivos no acompañaban. Su equipo estaba hundido en el fondo de la clasificación y el descenso a la división de plata era un peligro más que real. Esa mala posición de su conjunto en la tabla clasificatoria desembocaba en inestabilidad y provocaba constantes cambios en el once inicial. Por ello, Herrmann fue perdiendo paulatinamente continuidad en las alineaciones de la escuadra del Borussia Park. Esa crisis de resultados y una pequeña lesión muscular le impidieron ayudar a su equipo en las jornadas finales.

El suizo Lucien Favre cogió los mandos de la nave y el equipo, que parecía desahuciado, comenzó a reflotar. En el tramo final del campeonato consiguió otorgarle solidez defensiva y culminó su gesta derrotando en la promoción por la permanencia al Bochum con un Ter Stegen estelar. Curiosamente, cuando los resultados colectivos por fin acompañaban el protagonismo de Herrmann disminuía de forma preocupante haciendo pensar que no era un jugador que agradase a su nuevo técnico. Nada más lejos de la realidad, ya que tras un inicio de campaña en el banquillo, Patrick se consolidó en la titularidad en la 2011/2012.

EL DETONANTE DE REUS
Herrmann se hizo amo y señor del carril diestro de su equipo en fase ofensiva y su titularidad permitió a Marko Reus consolidarse en la posición de segundo punta. El resultado no pudo ser mejor, puesto que ambos respondieron de forma regular con un rendimiento extraordinario, convirtiéndose en los artífices de la gran temporada que está realizando su equipo. En apenas unos meses, el Borussia Mönchengladbach ha pasado de luchar con todas sus fuerzas para eludir el descenso a pugnar de tú a tú con el Schalke 04 por una plaza en la próxima edición de la Uefa Champions League.

Tanto Reus como Herrmann han despertado el interés de los principales clubes del continente. Manchester City, Chelsea, Arsenal, Tottenham, Juventus, Inter y Napoli mostraron interés en la perla de Saarbrücken pero todo hace pensar que no cambiará de equipo el próximo verano, más aún después de la venta de su compañero de ataque al Borussia Dortmund. Hasta entonces ambos lucharán por ayudar a su actual equipo por clasificarse para la máxima competición continental.

Una clasificación que se ha complicado en las últimas semanas con la lesión de Herrmann como ha reconocido su propio técnico. “Sin él tenemos un balance diferente entre la defensa y el ataque” asegura su técnico. Los de Mönchengladbach solamente han sumado cuatro puntos de los último doce en juego. Más maduro y consolidado, Patrick está destinado a convertirse en el líder de su equipo la próxima campaña.


No hay comentarios: